10 Errores que la SERIE de HARRY POTTER de HBO debe EVITAR

Con la tan ambiciosa como polémica decisión de reiniciar la franquicia del Mundo Mágico de Harry Potter, hay muchas oportunidades por aprovechar, pero aun más riesgos que hay que cubrir.

Lo predecible ahora es inevitable e inminente, HBO está preparando una serie televisiva de la saga de Harry Potter que cubrirá una temporada por novela, y tendrá a su autora original como productora ejecutiva, lo que no ha dejado indiferente a nadie. Tanto los fans como los foráneos están frotando las manos de emoción y/o nervios, pero hay que recordar que lo peor que puede pasar es un inconcluso proyecto que no perjudicará en nada al legado de los libros y las cintas.

Ya lo predijimos un par de años atrás en este mismo blog, pero el reinicio o «nueva versión» como quieran llamarle, era inevitable por la renovación de derechos comerciales, pero ni siquiera yo lo pude haber predicho tan pronto.

Sin más, veamos cuales son esos grandes riesgos que pueden llevar a este nuevo proyecto a un fácil fracaso:

1.-Evitar mantener el concepto artístico

Desde la tipografía, pasando por el vestuario, la fotografía, y el diseño de producción. Para ser consolidada como un producto independiente y con brillo propio, la serie debe tener una identidad original. En lo posible fiel a las novelas, pero sin perder la originalidad creativa. Un producto que lo supo hacer bien, por ejemplo, es Hogwarts Legacy.

2.-Evitar competir con las películas

Las comparaciones son inevitables, y se harán escena por escena. Por eso mismo no se debe buscar hacer un «mejor» producto con las películas en las cabezas de los escritores. Se debe procurar hacer un «mejor» producto con sus propios objetivos y camino. Yo defiendo que hay millones de escenas que la serie puede mejorar y «corregir»; pero pienso que dará un mejor resultado si se busca algo original o único, sobre algo superior.

3.-Evitar buscar o enfocarse a un público nuevo

Si hubieran pasado por lo menos 20 años desde el fin de la saga cinematográfica, quizás hubiese sido coherente pensar en un público nuevo. Pero la serie se adelantó demasiado como para que haya una brecha generacional tangible. Puedo apostar a que más del 90% de los que verán la serie, ya sabrán en todo momento lo que pasará. Sin embargo esto puede ser una fortaleza, pues se puede trabajar mejor en la aventura y la narrativa, que en intentar sorprender a fuerzas. Hoy nadie se comerá las uñas por saber quién es el enemigo oculto en la Piedra filosofal, o se caerá del asiento cuando se lo revele. Sin embargo, esas pistas sutiles pueden ser aun más complacientes ya cuando todos sepan lo que se viene.

4.-Evitar mantener la música

Esto puede ser incluido tanto en el primer punto como en el segundo, pero desde el teaser trailer ya se cometió un gran error. La banda sonora de las películas, específicamente la compuesta por John Williams, es icónica y se re la relaciona visualmente con las escenas que ya todos conocemos. Se necesita que el concepto de la serie tenga un alma propia desde esos detalles. Esta idea la tengo aun más firme desde que a House of The Dragon le jugó más en contra usar la música de Game of Thrones. Ahora, creo que muy astutamente, se pueden usar pequeños arreglos de los temas más importantes como Hedwig’s Theme, en algún momento de clímax como factor sorpresa. Esta idea me vino del Remake de Shaman King, que trajo el opening de su primera adaptación como golpe de nostalgia para una escena importante.

5.-Evitar separarse de los libros y sobre expandir

Cambiar la historia es malo. Respetar los conceptos es bueno. Fotocopiar y calcar los libros es mediocre, Expandir no está mal. Sobre expandir, es uno de los peores errores que se pueden cometer. Hay suficiente material para hacer 100 versiones diferentes de la misma historia, igual de entretenidas y originales. Solo falta serle fiel a un concepto inicial.

6.-Evitar omitir el más mínimo detalle de historia

Hay cambios que son válidos en el cambio de formato literario a audiovisual, como los diálogos, los gestos, el tono, la ambientación, entre otros. Sin embargo una de las más grandes fortalezas de la serie, es que las películas omitieron por lo menos un 35% de lo narrado en las novelas. En este aspecto, pueden ignorar lo que dije en el punto 3 sobre las sorpresas. Sería imprudente y estúpido no aprovechar todos estos huecos para agarrar en curva a todos aquellos que no disfrutaron las novelas. Tendremos tramas enteras omitidas durante toda la saga (como P.E.D.D.O.), flashbacks de personajes que no vimos en pantalla (como Tom Riddle, Grindelwald o los Potter), y se profundizarán en temas que las películas dejaron en ambigüedad (como Regulus Arcturus Black). Y ni mencionar el desarrollo de los miles de personajes tanto protagonistas como secundarios, que fueron re concebidos en las películas.

7.-Evitar experimentar con actores, directores y escritores de moda

En primer lugar, creo que se deben buscar actores que tengan un balance entre talento actoral y parecido a las descripción de su personaje. No buscar nombres grandes porque sí, no quiero a Timothée Chalamet como Lupin, aunque debo admitir que Adam Driver sería un gran Snape si fuese británico. En segundo lugar, en cuanto a directores y escritores, me refiero a evitar la variedad y/o rotación. Tener a demasiados escritores, o invitar a directores ocasionales, puede perjudicar el discurso, el tono y la personalidad de la serie. Tiene que haber una cabeza persistente.

8.-Evitar dar un rol muy visible o activo a J.K. Rowling

No es secreto que la autora resultó ser una de las personalidades más ilusas, y una de las muti millonarias más caprichosas. Primero hay que partir que si consumes de cualquier forma esta serie, estás poniendo billetes en su bolsillo, sin escape, y aunque puedes disfrutar todo lo previo a su escándalo sin remordimiento, hacerlo con este producto sí te debería hacer sentir culpable. Sin embargo no estoy aquí para juzgarte, sino para debatir sobre el proyecto. La casa productora debería evitar en todo lo posible glorificar de cualquier manera a Rowling, por lo menos no tomarla en cuenta en lo absoluto en la promoción de la serie, ni en decisiones creativas como casting, arte, etc. Esto no resolverá el problema, pero sí calmará tu conciencia. Esperemos que su rol de productora ejecutiva solo sea una formalidad.

9.-Evitar referencias a Animales Fantásticos

La saga de Animales Fantásticos fue dañada y matada por una coincidente enorme cantidad de polémicas y tropiezos externos. Pero también pecó de una escritura condescendiente y plana. En esta nueva versión, todo ese micro universo tiene que dejar de ser canon. Newt Scamander aún puede existir, pero como una mención tal como lo hace en los libros. De igual manera, se puede explorar lo poco que si funcionó de esas películas, como las bestias mágicas y artículos, enriqueciendo el mundo que se quiera plasmar; sin alterar la historia, claro.

10.-Evitar precipitar el proyecto

Para finalizar, una de las razones por las que veía este proyecto mínimamente hasta el 2030, y aún espero que sea lanzado por esas fechas, es que creo que debe ser cocinado lentamente. No me malentiendan, no creo que debamos esperar 3 años para cada temporada, todo lo contrario, creo que debemos esperar unos 3 a 5 años sólo y únicamente para la primera temporada de la serie, para planear esta saga, para castear a los personajes, para evitar retrasos, para escribir con coherencia, para proponer un estilo que se mantenga a largo plazo, y para producir sin improvisar. Creo que el peso que cae en la pre producción es demasiado grande, y no debe ser acelerado ni subestimado. Y también creo que el casting es lo último que debe hacerse, y aun así, dándole su tiempo. Recordemos que los actores firmarán un contrato de 10 años, (dato confirmado), y los cambios físicos vendrán. Es algo que no se puede predecir, y el re casting no solo lo veo probable, lo veo inevitable. Pero hay que procurar que ocurra lo menos posible y siempre tener un plan B, C y hasta D a la mano. Como ejemplo tenemos la trilogía de His Dark Materials que cumplió a la perfección, pero aun así no pudo evitar que su protagonista madure tan notablemente durante su adolescencia y en sólo 3 años.